La marea subía y las suaves olas, aún no habían borrado la fecha, era el 1 de enero.
1.- Cuando escribas tu Diario Íntimo, para tu crecimiento personal, haz contigo mismo un «pacto de confidencialidad» es decir no lo enseñes a nadie. Hay una razón, escribimos para ser leídos, pero en este caso si sabemos que nos van a leer y que una mirada nos puede juzgar ya no vamos a ser lo sinceros con nosotros mismos que es de lo que se trata, el encuentro contigo mismo y honesto sin sentirte juzgado, el juicio no es necesario.
2.- Sí puedes leer como autor algún fragmento de lo escrito a alguna persona de tu confianza que desees, sin enseñárselo, se lo lees.
3.- Esa lectura voluntaria puede serte de gran ayuda para comprenderte.
4.- A la vez el «contrato de confidencialidad» te dará una gran libertad y sinceridad de contenido y expresión al escribir.
5.- Isabel Allende afirma en una de sus novelas «La palabra escrita es profundamente liberadora»